viernes, 28 de abril de 2017

Segunda temporada de "Into The badlans", la diversión continúa


"Into the Badlans" fue una de esas series sorpresa que ví el pasado año, un poco o demasiado corta para mi gusto, tan es así que ni me acordé de mencionarla en el ranking de series, aunque no sé si lo debía hacer porque la serie fue estrenada el año anterior. Como ya dije en su momento la serie es una extraña mezcla de géneros: acción, artes marciales, mundo postapocalíptico al estilo Mad Max, un toque de western, ciencia ficción distópica con algunos toques steampunk, en la que sobresale sobre todo su faceta de acción y artes marciales, -impresionantes las escenas de las peleas, verdaderas coreografías visuales-, con un toque de cómic gráfico, en el que la violencia y la sangre salpican a menudo, -y lo digo literalmente,- la pantalla.

Pues bien hace un mes que esta producción de la cadena AMC inició su segunda temporada y hace unos días se ha anunciado su renovación para una tercera dados su excelentes datos de audiencia. El  comienzo de la temporada  no ha podido  ser más prometedor. Dejamos al final de la pasada temporada  a MK raptado por unos monjes, a Sunny prisionero en un barco  fuera de las tierras baldías y con casi la certeza de que el barón Quinn había muerto a sus  manos, y retomamos la acción allá donde la dejamos. La temporada comienza con un Sunny encadenado para trabajar como esclavo en unas minas, sonando de fondo la pegadiza canción  "Human" de Rag'n'Bone Man, vemos a MK en lo que parece un monasterio donde hay otros chicos especiales como el, a Quinn escondido en un refugio bajo tierra protegiendo y/o reteniendo  a la doctora Veil que acaba de dar a luz el hijo que ha tenido con Sunny y a La Viuda maniobrando para hacerse con el control de las Badlands. 

Y, de nuevo,  el violento y absorbente mundo de las Badlands nos vuelve a atrapar. Sunny escapará de las minas junto a un orondo camarada, interpretado por el cómico británico Nick Frost,  que le pondrá un gracioso contrapunto en su viaje de regreso  a las Tierras Baldías, MK huirá del monasterio perseguido por unos abates guerreros, perdiendo en el camino a su amiga Ava, Veil intentará escapar de Quinn y La Viuda se enfrentará al resto de barones e intentará una alianza con un renacido Quinn que además asesinará a su propio hijo, Ryder, granjeándose el odio de su ex-mujer, Lydia y madre de Ryder. Oscuro y duro mundo de luchas y ambiciones en el que pocos serán los personajes que mantengan su código ético, sus principios.

Cabe señalar que cuatro de los diez episodios de esta temporada, incluido su final, están dirigidos por el cineasta español Paco Cabezas que parece haberse especializado en series internacionales. Paco dirigió varios episodios de "Penny Dreadful", ha intervenido en algún capítulo de "Dirk Gently" y dirigirá episodios de "The Strain" y "The walking dead". La primera temporada de esta serie nos presentó y situó a los diferentes personajes en la trama, de forma que esta temporada se nos presenta mucho más amplia y abierta tanto en escenarios como en posibles conflictos. Espero que sigan manteniendo el buen nivel de la serie y no la pifien como ha sucedido en otras series televisivas.

Act: Esta segunda temporada no ha defraudado, el final de la temporada ha estado cargado de tensión y de giros inesperados,  con abruptas rupturas como la que se produce entre Tilda y La Viuda,  que hasta ahora era como una especie de madre para ella. La muerte de Veil, a manos de Quinn,  añadió mayor dramatismo, si cabe, al final de la temporada. La Viuda parece haber robado en esta temporada buena parte del protagonismo a Sunny. Destacable, también,  el significativo papel que tienen las mujeres en esta serie: Jade, La Viuda, Lydia, Veil, Tilda. Esperamos con interés la tercera temporada que imaginamos se estrenará el año que viene.

jueves, 27 de abril de 2017

Cuarta y ¿ultima? temporada de Sleepy Hollow

Terminó, hace más de un mes, con más pena que gloria la cuarta y probablemente última temporada de "Sleepy Hollow". Una serie que empezó sorprendiéndonos, con una trama absolutamente inverosímil, pero sumamente entretenida, que llegó a crear su propia mitología pero que tras dar demasiados bandazos y hasta un último reseteo con su cuarta y de momento última entrega ha dado dados pruebas más que evidentes de que no puede dar más de sí, que después de arrastrase penosamente durante cuatro años  su recorrido debe llegar a su fin. A los hechos y sobre todo a las audiencias me remito, el último capítulo no llegó ni a los 2 millones de espectadores. ¿Dónde quedan los más de 10 del primero?

Recordemos que la historia de la serie nos mostraba a un tal Ichabod Crane que trabajaba para George Washington como agente y que resucita 230 años más tarde enfrentándose al jinete sin cabeza (el jinete de la muerte) en un mundo absolutamente nuevo y diferente para él. En esta andadura por nuestro mundo tendrá la compañía de la teniente Abigail Mills. En esa primera temporada,  además de al jinete sin cabeza deberán enfrentarse al demonio Moloch,  que pugna por liberarse del Purgatorio para dominar nuestro mundo,  trayendo el fin de los días. Tendrán la ayuda, en esta lucha,  de Katrina, esposa de Ichabod, bruja desterrada al Purgatorio. El final de la primera y la mayor parte de la segunda temporada tendrá como villano principal de la serie al hijo de Ichabod, Jeremy Crane, conocido en nuestro mundo como Henry Parish,  (interpretado por John Noble),  que odia a sus padres por haberlo abandonado y que se convertirá en un trasunto del jinete de la guerra.

En la tercera temporada, a Moloch le sucederá otra amenaza, la de Pandora y su maestro, un dios sumerio al que llaman El Oculto. Pandora será destruida pero no sin graves perdidas personales. La batalla le costará el alma y la vida a la agente Mills. En la cuarta temporada que supone un absoluto reseteo respecto de las temporadas anteriores. Crane se traslada a Washington y conoce a la agente de la Seguridad Nacional, Diana Thomas, que ocupará en cierto sentido el papel de la teniente Mills,  y a los miembros de la Agencia 355 creada por George Washington para registrar actividades sobrenaturales, Jake Wells y Alex Norwood. Crane descubrirá que la hija de la agente Thomas, Molly, es el próximo testigo. La amenaza, en esta ocasión, se llama Malcom Dreyfuss, un directivo de una poderosa multinacional que ansia la inmortalidad a toda costa y al que no le importará liberar nuevamente a los cuatro jinetes del apocalipsis. Una adulta Molly procedente de un horrible futuro alternativo donde Dreyfuss ha triunfado ayudará a Ichabod a terminar con esta terrible nueva amenaza.

lunes, 17 de abril de 2017

"Beowulf: Return to the Shieldlands", una interesante pero fallida historia de fantasía épica


En mi propósito de buscar nuevas propuestas seriéfilas que cubran lo que está siendo una regularcilla temporada, me encontré con esta serie  de fantasía épica producida por la cadena ITV  que se emitió entre enero y marzo del pasado año. La serie fue cancelada al  finalizar su primera única temporada debido a los bajos ratings de audiencia. La serie gira en torno a las aventuras del mítico guerrero  Beowulf  que regresa a la ciudad de Herot, en las Shieldlands, un reino mítico de ambientación medieval, lleno de ogros y otros series fantásticos (cambiaformas, trolls, tribus semihumanas, etc),  para descubrir que el barón o "thane" Hroogar (interpretado por William Hurt), el hombre que le crió y formó, ha muerto asesinado. 

Hay, pues, un asesino suelto en el reino y una reunión de todos los "thanes" para elegir al sucesor de Hroogar y sobre Beowulf recae la presión de atraparlo. (Al final parece ser un cambiaformas). Rheda, la esposa de Hroogar  lucha por proclamarse  baronesa del reino.  Cuando Slean, hijo de Rheda,  y Scorann desaparecen, Beowulf y Rate se aventuran en el bosque para encontrarlos, donde los enemigos de Herot todavía se encuentran en libertad. Rheda deberá  demostrar ser digna de gobernar las Shieldlands cuando la guerra entre las tribus amenaza con colapsar Herot.


Beowulf viaja a Mere con las armas prometidas a Thane Gorrick. Pronto descubrirán nuevos peligros cuando el anciano "thane" los acoge con hostilidad hasta que su hija enferma. Beowulf y la joven Breca deberán salir a buscar la cura y salvarla, aunque finalmente fallece. Posteriormente Beowulf reconstruye las defensas de Herot pero inesperadamente un troll ataca la ciudad. Mientras él y Breca viajan al bosque para evitar nuevos ataques, Slean, hijo de Rheda abandona Herot y viaja a Bregan después de escuchar una conversación entre Elvina y Beowulf. Mientras Beowulf lucha contra la invasión de la tribu Wulfing, Rheda se enfrenta a Jogan, un enemigo de su pasado. Mientras tanto, el hermano de rheda, Abrecan se pregunta si Slean sería lo suficientemente valiente como para traicionar a su propia madre. 


A medida que Slean y la joven Kela, la hija pequeña del thane Garrick, se preparan para su boda, Abrecan se ve obligado a aceptar las nuevas leyes de Rheda que se han extendido por todas las tribus o de lo contrario enfrentarse a su hermana. Un romance florece entre Beowulf y Elvina, pero cuando los dos son capturados, Elvina se ve obligada, en un momento de máxima tensión y necesidad, a revelar un oscuro secreto de su pasado, que ella es también una cambiaformas,  una hija de la tierra, y que ese monstruo que la sigue a venes y a la que ella visita en una especie de cueva es su hijo Brendel. Mientras que Beowulf lucha para llegar a un acuerdo en su relación con Elvina, Rheda viaja a Bregan para enfrentarse a su hermano y refuerza la defensas de Herot  que están al borde del colapso. Rheda se escapa de la custodia en Bregan, pero ahora se enfrenta a su mayor amenaza ya que Herot está amenazada por la invasión de las fuerzas de Abrecan y sus aliados, unos feroces vikingos. El futuro de Herot descansa sobre los hombros de Rheda y con la ayuda de Beowulf, luchará contra las fuerzas de su hermano.

La serie es una recreación muy libre del conocido canto épico antes citado pues apenas sigue su historia original, tan solo algunos nombres del canto  aparecen referenciados en la serie. A pesar de su mala recepción de crítica y público yo he visto su primera y única temporada y bueno, se dejaba ver. Me pareció  entretenida, sin más, con una trama un tanto justita, la verdad,  no daba para mucho más, unas interpretaciones pasables, y una ambientación medieval, de pueblo nórdico, más o menos aceptable, con algunas criaturas fantásticas, que probablemente y a pesar de su limitación técnica (no todas la series pueden ser Juego de Tronos), fuesen la parte más interesante de la serie.

sábado, 1 de abril de 2017

"Time after time", cancelada sin acabar su primera temporada

Se estrenó el 5 de marzo con un episodio doble y no ha conseguido llegar ni al 6º episodio. La cadena ABC la ha retirado de manera fulminante  de la parrilla. El anuncio se produjo hace tres días.  Está claro que la prolífica apuesta por las series sobre viajes en el tiempo no ha tenido mucho éxito, a tenor de los resultados de las audiencias esta temporada. A mi, la serie sin parecerme nada del otro jueves,  es difícil sacar petróleo de una trama que está pensada para una película, al igual que sucedió con "Frequency", me pareció hasta cierto punto simpática. Desde luego y puede ser algo personal y a pesar de sus más que evidentes limitaciones la veía  mucho más a gusto que la insoportable "Timeless". 

Podría haberse aprovechado mucho más y mejor el choque cultural de nuestros decimonónicos protagonistas con nuestro presente, como hiciera más acertadamente la película de los años 70 en la que se basa, pero parece que nuestros personajes se adaptaron demasiado pronto a nuestra época, como si siempre hubiesen vivido en ella. La trama era bastante limitada. Desgraciadamente nos quedaremos sin saber que fue del proyecto Utopía y donde, cuando y como acababa la persecución de nuestro ínclito H.G.Wells, interpretado por Freddie Stroma, al perverso e inmoral doctor Stevenson (Josh Bowman), más conocido como Jack El Destripador. Pese a las numerosas críticas por su actuación, Génesis Rodríguez le daba a su personaje cierto toque de espontaneidad, ingenuidad y frescura que era de agradecer.