Páginas

miércoles, 26 de julio de 2017

"Somewhere between" o cuando la vida te da una 2ª oportunidad


Hace un par de días que se ha estrenado por parte de la ABC un drama policiaco con toques fantásticos o de ciencia ficción. La historia nos cuenta la historia de una periodista televisiva: Laura Price, casada con el fiscal del distrito, Tom Price,  en un momento en que se plantea la ejecución de un condenado a muerte por el asesinato de varias mujeres, años atrás. Una nueva oleada de crímenes acelerará la ejecución del reo, sobre el que puede existir alguna duda razonable sobre su culpabilidad aunque todo pareciera indicar lo contrario. En este contexto, la hija de Laura, Serena, es raptada y asesinada por el "killer" que asola la ciudad. Laura entra, tras la muerte de Serena, en una espiral depresiva que le conduce al suicidio, pero cuando parece que asistimos a la prematura e irreversible muerte de la protagonista, de repente todo parece repetirse de nuevo y nos trasladamos a unos días antes de la muerte de su hija: cuando ella es recibida en casa por su cumpleaños, palabras que se  repiten, pequeños accidentes domésticos que vuelven a suceder.  Paula, conocedora del trágico destino de su hija, tendrá muy poco tiempo para evitar, de nuevo, el crimen. 

Este argumento es, en parte,  similar al de la serie de Syfy "Daybreak" que giraba en torno a los bucles temporales, aunque, tras el visionado de un solo capítulo, no sabemos si se trata de un único viaje hacia atrás en el tiempo, una semana antes del crimen, o como en otras ocasiones asistiremos a un bucle temporal más o menos repetitivo y persistente. La serie, de 10 episodios, es una adaptación de la serie de televisión coreana "God´s gift: 14 days" transmitida por la SBS y cuyo póster promocional también adjunto. Ejerce como guionista y productor ejecutivo de la serie Stephen Tolkin (The Legend of Seeker). Aun es pronto  para formular un juicio definitivo sobre esta serie que me resultó bastante convencional, durante la mayor parte de este episodio piloto, y que sólo me  provocó cierto interés en su tramo final. Veremos cual es mi veredicto final, al acabar la serie. Act. 25-9-2017: La serie era más bien una miniserie, las llaman "limited series", sin posibilidades de prolongación. Interesante argumento que en manos más hábiles, desconozco la versión coreana, hubiera dado mucho más de si. He logrado verla hasta el final no sin esfuerzo, las interpretaciones, en general bastante deficientes, mal dosificada la tensión, situaciones increíbles. Para olvidar.


lunes, 24 de julio de 2017

"Blood Drive": sexo, sangre y rock and roll


Hace poco más de un mes se estrenó esta serie estival, un tanto gamberra, de SyFy, que sigue la estela de películas como "Grindhouse" dirigida hace algunos años, en 2007, por Robert Rodríguez y Quentin Tarantino y que, como aquella, rinde homenaje a los llamados "films exploitations", cintas  donde se mezclaban, en grandes dosis, gore, violencia y un más que explicito erotismo. Esta serie nos traslada a un mundo distópico que sufre las consecuencias del cambio climático, donde el agua y la gasolina escasean, (el petroleo está por las nubes), un mundo  dominado por una omnipresente corporación   que está, también, tras la organización de la carrera mortal, con vehículos alimentados por sangre humana, carrera mortal que es el leif motiv de la serie. Y es que quien llegue el último puede ser convertido en rojo combustible. Y quien gane la carrera se llevará un jugoso premio en metálico de 10 millones de dolares.

La serie está protagonizada por una exuberante femme fatale, Grace D´Argento, interpretada por la actriz española Christina Ochoa y por un policía, interpretado por Alan Ritchson, que cree que puede salvar al mundo,  aunque quien brilla con luz propia  en la serie es el maestro de ceremonias de esta singular carrera, Julian Slink, interpretado por Colin Cunningham, en un papel absolutamente histriónico que dirige el show de unos inolvidables finales de carrera, cuya parafernalia me recordó el ambiente de la taberna "La teta enroscada" de la película "Abierto hasta el amanecer", si bien en esta serie predomina, más que la vertiente de cabaret presente en aquella, un ambiente de heavy metal post-apocalíptico. Nuestros protagonistas se verán obligados a participar en esta macabra carrera por todo el país, -cada capítulo nos narra una jornada diferente- y tendrán que hacer todo lo posible, incluso trampear, con los métodos más inverosímiles, para no quedar los últimos, o para que no se activen las bombas que llevan incorporadas en sus cabezas. 


El primer capítulo fue una presentación de lo que veríamos en los siguientes capítulos y estuvo por encima de la media de capítulos que le han seguido. Una autentica montaña rusa de acción descerebrada, sangre a raudales, sexo más o menos explícito y situaciones inimaginables, más allá de la razón o el sentido común. En esta serie veremos mutantes, mutilaciones, caníbales, sofisticados robots femeninos capaces de producir las mayores torturas y placeres, una pareja de serial-killers, un manicomio, -donde aparentemente encerraron a la hermana de la protagonista-, drogas psicodélicas que incitan al fornicio más desenfrenado que culmina en un holocausto caníbal y otras muchas imagenes igualmente sobradas y perturbadoras. Desde luego no es una serie para todos los públicos. Sólo para amantes del gore y el bizarro más loco. No hay que tomársela en serio. La primera que no se la toma en serio es ella misma. La duda está en si esta serie será capaz de no repetirse demasiado en cada capítulo, -mucho nos tememos que no-, ofreciendo una trama variada y divertida.

Act. 8-9-17: La serie acaba de ser cancelada tras su primera temporada. La razón de la cancelación, como se pueden imaginar, ha sido debida a sus pobres audiencias, pues apenas ha promediado 470.000 telespectadores. No obstante hay decisiones que no se acaban de entender ya que otra serie como "Wynonna Earp" ha sido renovada, pese a tener cifras de audiencia muy similares. 

Vista  la serie  completa y a pesar de sus excesos o precisamente por ello, hay que agradecer esta entretenida, arriesgada y gamberra propuesta que supone una bocanada de aire fresco en el a veces adocenado y aburrido panorama televisivo actual. La serie no pasará a la historia por sus interpretaciones, de acuerdo, pero tenía,  con  ese carácter de espectáculo grand-guiñolesco todo lo necesario para convertirse en una pequeña pieza de culto para los amantes del cine bizarro y trash, ese cine a caballo  entre la serie B y la serie Z y que mezclaba, en generosas dosis, y con unos argumentos delirantes  terror, sexo y violencia. Ese tipo de películas que hace una década homenajearon Rodriguez y Tarantino con  "Grindhouse". "Blood Drive" es una serie para verla sin prejuicios. Y lo siento, a riesgo de entrar en polémicas, vistas las cancelaciones de Syfy esta semana, donde esté "Blood Drive" con sus locuras y excesos se quite "Wynonna Earp".


domingo, 23 de julio de 2017

"Cracks", ninfas y pasiones ocultas en un internado inglés


Título original: Cracks. Año: 2009. Duración: 104 min.País: Reino Unido e Irlanda. Director: Jordan Scott. Guión: Ben Court, Caroline Ip. Música: Javier Navarrete. Fotografía: John Mathieson. Interpretes: Eva Green (Miss G), María Valverde (Fiamma Coronna), Juno Temple (Di Radfield), Sinéad Cusack (Miss Nieven), Imogen Poots (Poppy), Ellie Nunn (Lily), Adele McCann Laurel), Zoe Carroll (Rosie), Clemmie Dugdale (Fuzzy), Deirdre Donnelly (Miss Lacey). Montaje: Valerio Bonelli. Coproducción: Irlanda-GB; Scott Free / IFC Films. Género: Drama. Colegios  Adolescencia. Años 30.

Opera prima de la hija de Ridley Scott, Jordan Scott,    esta producción independiente del año 2009, es bastante desconocida para el gran público español, pues hasta donde yo sé,  creo que no se estrenó en las pantallas españolas. La descubrí hace poco  y me pareció un feliz hallazgo:  una cinta que transmite más cosas de las que aparenta y que merecería haber tenido una mayor difusión. La historia  se desarrolla en un internado ingles para señoritas, donde un grupo de chicas viven aparentemente felices disfrutando de las historias, excursiones y saltos desde el trampolín que les regala una joven y atractiva profesora, Miss G, interpretada por una maravillosa Eva Green, más  sensual que nunca. Todo cambiará con la llegada de una nueva joven, Fiamma interpretada por la actriz española Maria Valverde, que ha vivido en varios lugares y ha tenido experiencias diferentes   a las otras chicas, despertando el interés de Miss G y más tarde una enfermiza obsesión que derivará al final en tragedia.

Creo no equivocarme si digo que esta película no es para todos lo públicos. Es una película de ritmo pausado,   estéticamente bella, con  una sensacional fotografía, una puesta en escena muy cuidada (paisajes idílicos, vestuario acorde, bellos decorados, etc.) y unas hermosas melodías compuestas por Javier Navarrete. Es una película que más que mostrar sugiere, insinúa. La película  habla, al fin y al cabo  del fin de la inocencia y del despertar sexual de unas chicas en un internado ingles, con el trasfondo de la segunda guerra mundial. Es una película, en cierto sentido, de iniciación; el  descubrimiento de la  propia identidad y sexualidad de unas adolescentes tras los recios muros del internado.  Este, por cierto, está retratado con bastante fidelidad, con sus rígidos profesores, su amplio comedor y salón de actos, sus jardines, etc. El internado es para ellas una especie de burbuja protectora, un mundo plácido en el que la monotonía se rompe  tan solo los días que salen   al lago a nadar, desnudas. La  cinta es un canto a la belleza femenina en la que Miss G es el epítome de dicha belleza.


Y digo que la película es una cinta de iniciación donde Miss G es la maestra de ceremonias. Miss G fomenta en sus alumnas el cultivo del deporte y la belleza y ellas se miran en el espejo de su distinguida y enigmática  profesora,   a lo que contribuye la magnética belleza de Eva Green, con  su mirada profunda y misteriosa. Con su sola mirada dice mucho más, transmite más emociones que otras actrices con muchas líneas de dialogo. Probablemente el de Eva sea uno de los rostros más bellos  y expresivos del panorama cinematográfico actual. En esta película Eva Green brilla con todo su esplendor y realiza una de sus mejores interpretaciones. A lo largo de la cinta asistimos a un complejo drama en el que se combinan relaciones de poder, admiración y deseo entre mujeres. No hay más que ver las miradas fascinadas de sus alumnas que miran hacia arriba, hacia una Miss G, adulta, segura, elegante, sensual, cúlmen y meta de ese ideal femenino, inalcanzable todavía para ellas. 

Ese mundo tranquilo y plácido, donde se tejen esas relaciones de poder o liderazgo, admiración y deseo se ve alterado por la llegada de la joven Fiamma que logrará captar la atención de Miss G. Miss G descubre en ella cierta fragilidad, unida a una mayor madurez  y  belleza. A partir de un momento determinado Fiamma se interpone, de algún modo, entre Miss G y sus alumnas, al atraer la atención casi en exclusiva de la profesora. La envidia, los celos entre las chicas y el rechazo que recibe Miss G, por parte de Fiamma a sus requerimientos carnales se convierten en el detonante del trágico final. En la película se puede observar el  contraste entre una moral conservadora, la moral de la época y el amor prohibido subyacente que late bajo las relaciones entre profesoras y alumnas, y en última instancia en el triangulo femenino  protagonista. Existe, a lo largo de todo el metraje, una fina línea que no se traspasa nunca entre el deseo sexual y su consumación. Y es que como he dicho anteriormente la película insinúa más que muestra. Disimuladas bajo el amor a la belleza y el deporte (la natación) está la amistad de las féminas tras la cual  se oculta a veces el deseo sexual.  La llegada  de un elemento extraño, como la joven  Fiamma,  hará saltar por los aires esa relación de admiración y deseo entre Miss G y sus alumnas, y especialmente de la joven Di (Juno Temple). 

Probablemente el título de la película, Cracks,  haga referencia a eso que se rompe al final y es que el final es triste, doloroso, trágico. Miss G provoca la muerte de Fiamma. El rechazo de la muchacha destapó el lado oscuro, el verdadero rostro  de la idolatrada  Miss G.  La idolatrada Miss G cae de su pedestal ante los ojos de sus alumnas y especialmente de Di. En resumen, la película me ha gustado. Es una película  con cierta magia, esteticista,  en la que destacan  el ambiente, la fotografía, la música, pero sobre todo las magníficas interpretaciones del plantel protagonista que nos dejan entrever las miserias, las bajas pasiones, la cara oculta del alma humana.

domingo, 9 de julio de 2017

"Yo antes de tí", una triste historia romántica


Título: Yo antes de ti. Título original: Me before you. Director:Thea Sharrock. País: USA. Año: 2016. Duración: 110 min. Género:Drama, romance. Reparto: Emilia Clarke (Louisa Clark), Sam Claflin (William Traynor), Jenna Coleman, Charles Dance, Matthew Lewis. Guion: Jojo Moyes, Scott Neustadter y Michael H. Weber; basado en la novela de Jojo Moyes. Estreno en España: 1 Julio 2016.

Hace unos días que vi esta película protagonizada por Emilia Clarke, la Danareys Targareyn de "Juego de Tronos". Tenía curiosidad por ver a Emilia en otro tipo de registros diferente al de la épica serie. Y descubrí que acababa de estrenar una cinta romántica a más no poder. Sin demasiada información me lancé a verla. No suelo leer a los críticos, -desde luego nunca antes de ver una película, porque en la mayoría de los casos discrepo bastante de ellos y no quiero que me condicionen lo más mínimo aunque a veces lo hago después para comprobar si realmente hemos visto la misma película y reirme de las estupideces que algunos de ellos vierten en periódicos, revistas y otros soportales digitales-. Bueno, pues a pesar de sus imperfecciones que las tiene y que señalaré después, la película me gustó, incluso, en algunos momentos me emocionó. Louisa Clark es una joven de 26 años que vive en un pueblo de la campiña inglesa. Trabaja de camarera en un bar y resulta ser un útil sostén de la frágil economía familiar, su padre se encuentra en paro y su hermana se quiere ir a estudiar a Londres. Es de naturaleza jovial, optimista, alegre. Es, además, espontánea, cándida, sencilla, sensible. Tras quedarse sin trabajo lo encuentra cuidando a Will Trainor, un joven y rico banquero que se quedó tetrapléjico, tras un accidente de tráfico



Will se ha convertido, tras el accidente, en un hombre amargado, triste, huraño que al parecer ha tomado una trágica decisión en su vida, aunque eso lo sabremos más tarde. Su vida así no merece ser vivida. Si embargo la aparición de Lou supone una bocanada de aire fresco en su existencia, un motivo para, aparentemente, seguir viviendo. Superados los primeros recelos y desconfianzas se hacen primero amigos y más tarde se enamoran. El le ayuda a crecer, a madurar, a expandir sus horizontes. Ella le dará auténticos momentos de felicidad, el único motivo dice él en un momento dado, para seguir levantándose cada mañana. Ella sufre un golpe moral enorme cuando descubre el deseo de su amado: poner fin a su existencia, pues para él   no es vida vivir de esa manera. Ella que ha entregado su alma por completo a la otra persona no entiende esa decisión, que él  no desea estar más con ella, pues todo sabemos que el amor es pura entrega.  Pese  a todo, al final Lou aceptará sus deseos, y Will morirá con un beso de su amada en los labios, sabiendo, sintiendo que ella ha sido lo mejor, lo más bonito que le ha pasado en esos últimos y dolorosos años.

Hace unos meses vi otra película "Bajo la misma estrella" que tengo pendiente de comentar en este blog. Las dos tratan sobre la enfermedad y el amor, y en estos casos siempre existe el riesgo de caer en lo lacrimógeno. Pues bien nuestra película podía haber caído fácilmente en ello si no hubiese sido por sus actores protagonistas, un contenido Sam Clafin al que vimos en "Los juegos del Hambre" y una camaleónica Emilia Clarke que es perfectamente capaz de transmitir esa ingenuidad desarmante que derrocha el personaje, acompañados por unos secundarios de primera, con Charles Dance, el odioso Twiyn Lanister de "Juego de Tronos". Y es que esta serie es una verdadera cantera de actores para el cine y la televisión. 

La película no está, no obstante, exenta de algunos fallos o imperfecciones que sin lastrarla por completo, la hacen menos creíble de lo que quisiéramos. Por ejemplo, no sabemos si es fallo del guión, la puesta en escena o la interpretación, pero no se nos transmite adecuadamente ese dolor insoportable  físico o existencial, tan necesario para entender los deseos de morir de nuestro joven protagonista, transmisión que si hemos visto en otras cintas similares como la citada anteriormente. Hay algo muy importante en cualquier buena película que se precie y es la capacidad de identificarnos con el personaje o de que este genere cierta empatía. Pues aquí ni lo uno ni lo otro. Es difícil empatizar con un personaje como Will Traynor. De ahí que al final tampoco lleguemos a comprender ni aceptar la razón de Will de morir, pese al generoso amor de Lou.

La película al margen de su critica cinematográfica ha generado cierta polémica sobre la legitimidad o no de la eutanasia o del suicidio asistido. No voy a entrar en esa polémica, allá cada uno con sus creencias, pero  es un terreno un tanto resbaladizo entrar a valorar con objetividad  sobre el deseo o no de vivir, la presunta calidad de vida y  el derecho a vivir de nosotros mismos o de los demás. Muchos miles de personas que viven y desean vivir, a pesar de las adversidades, nos enseñan que, casi siempre, merece la pena elegir vivir. 

sábado, 8 de julio de 2017

"La isla del tesoro", ho, ho, ho y una botella de ron...



Título original: treasure Island. Año: 1934. Duración: 105 minutos. País: Estados Unidos. Director:Victor Fleming. Guión: John Lee Mahin, basada en la novela de Robert Louis Stevenson. Música: Herbert Stothart. Fotografía: Harold Rosson, Ray June, Clyde de Vinna. Interpretes: Jackie Cooper (Jim Hawkins), Wallace Beery (Long John Silver), Lewis Stone (Capitan Smollet), Lionel Barrymore (Billy Bones), Otto Kruger (Doctor Livesey), Nigel Bruce (Trelawney), Charles McNaughton (Black Dog), William V. Mong (Pew), Charles "Chic" Sale (Ben Gunn), Doroty Peterson (Mrs Hawkins).  Productor: Hunt Stromberg. Productora: Metro Golwind Mayer (MGM). Género: Aventuras. Piratas. Fecha de estreno: 8 de agosto de 1934

Siguiendo con mi particular repaso de mi videoteca de clásicos me detengo un momento en esta película de aventuras. Fue también una de las primeras películas que vi en mi infancia  allá por el año 1971, en aquella Sesión de Tarde de los sábados,  cuando apenas hacía unos días que habíamos comprado la televisión en blanco y negro Vanguard de 24 pulgadas. Además, oh casualidad, aquel día, aquel sábado había comprado en la librería del barrio, el libro de Robert Louis Stevenson en la edición de RTV Salvat y que aun conservo en mi casa. Sea como fuere, aquel primer visionado de esta película se me quedó gratamente fijado en la memoria. Aquí les dejo unas breves notas sobre este gran clásico del género de aventuras, una cinta que para mí sigue teniendo todavía ese encanto, esa ingenuidad, ese carácter de aventura iniciática en un maravilloso blanco y negro, donde seguramente se combinan todos los tópicos que desde entonces asociamos al cine de piratas: seres un tanto malévolos, curtidos en mil batallas, en mil asaltos a barcos cargados de oro, llenos de tatuajes en sus cuerpos, con el parche en el ojo y la pata de palo como diría Sabina, la bandera negra con la calavera cruzada por dos tibias, como enseña, y aquella  canción de aire tabernario que decía  "veinte van en el ataúd, ho, ho, ho y una botella de ron", el loro del inolvidable Long Silver que repite una y otra vez una frase delatora ¿o eso es de otra película?, je, je. Inolvidable.

Jim Hawkings es un chico inglés que ayuda  a su madre  en la posada   "Almirante Benbow", una taberna situada en la costa inglesa, cerca de Bristol. Una noche oscura y tormentosa llega a la posada, y en estado de embriaguez,  un viejo pirata con la cara cortada, de nombre Billy Bones, cuya única posesión es un viejo cofre y que se hace llamar capitán. El  cofre contiene el mapa de la Isla del Tesoro, una isla donde estaba escondido el botín del capitán Flint. El hombre le dice a Jim que le dará una moneda de plata al mes   a cambio de “estar ojo avizor por si divisa a un marinero con una sola pierna”. La posada recibe al poco tiempo  la visita no de ese marinero sino de otro de siniestra apriencia, Black Dog, Perro Negro, con quien el capitán se enfrenta a causa del mapa y del tesoro. Perro Negro huye pero enseguida aparece otro marinero, éste ciego, llamado Pew. Pew le deja una nota, con una mancha negra por un lado (el redondel negro) y un aviso de que tiene hasta las 10 de esa noche para devolver el plano pero  Bones cae fulminado casi inmediatamente  por una apoplejía. Jim y su madre abren el baúl del capitán, mientras los piratas asaltan la taberna. Jim coge el mapa y escapa. Los piratas no encuentran lo que buscaban. En su huida el ciego Pew es atropellado por un carruaje que viene a socorrer a Jim y a su madre. Jim se reune con el doctor Livesey y el caballero  Trewlaney y descubren que el mapa   conduce a un legendario tesoro, el tesoro de  Flint. 

El caballero Trewlaney organiza el viaje a la isla del tesoro, y para ello contrata un barco,  la Hispaniola y a su capitán, el capitán Smollet,  no sin antes haber reunido una buena tripulación buscada por el que se postula como cocinero  del barco, John Long Silver, dueño a la sazón de la taberna El Catalejo. A pesar de que Bones había advertido a Jim sobre un marinero con una sola pierna, Jim y Long John Silver congenian enseguida y se hacen grandes amigos. El capitán Smollet desconfía de los objetivos del viaje y de la tripulación contratada. Durante la travesía se producen varios accidentes mortales entre los marineros leales, como el caso del contramaestre Arrow que cae al mar y espasto de los tiburones  o del marinero Henry, que cae desde lo mas alto del palo mayor. La noche anterior a desembarcar en la isla Jim escucha, escondido en el interior de un barril lleno de manzanas, el plan de Silver de que va a coger el tesoro y matar a los hombres del capitan  Smollet. Jim informa a Smollet, Livesey y al caballero Trewlaney de las aviesas intenciones de Silver. 

Jim baja a tierra con algunos marineros, -en el camino vuelven a matar a dos leales al capitan Smollet- y se encuentra con un viejo marinero, Ben Gunn,  al que abandonaron sus compañeros piratas hace tres años que le dice que él ha encontrado el tesoro de Flint. Mientras tanto Smollet y sus hombres leales huyen del barco  a la empalizada de Flint para preparar la defensa. Los hombres de Silver toman el barco, colocan la bandera negra en el mástil y atacan la empalizada cuando Smollet se niega a darles el mapa del tesoro. Si bien la situación parece desesperada, Jim se hace con un pequeño bote, un bote que había hecho Ben Gunn y se infiltra en La Hispaniola por la noche, cortando la cuerda del ancla y haciendo que el barco quede a la deriva. Al día siguiente encuentra en cubierta a dos marineros, uno muerto y el otro herido, un tal Hans. Entre Jim y el amotinado herido esconden el barco en la bahía norte de la isla. Jim arria la bandera pirata. Luego Hans intenta matar a Jim quien escapa  subiendo por las velas hasta un lugar seguro desde donde dispara al pirata en defensa propia que le había lanzado  un cuchillo, para matarle,  afortunadamente sin acierto.

Cuando Jim regresa a la empalizada, los hombres de Silver están ahí. Silver le dice a Jim que ha llegado a un acuerdo con el doctor Livesey para respetar sus vidas a cambio del mapa qye tenían y que ahora obra en su poder. Los piratas quieren matar a Jim pero Silver le protege.  Silver mantiene a Jim como rehén. Los piratas buscan el tesoro en el lugar indicado en el plano pero el hoyo está vacío, alguien se lo ha llevado.  Cuando algunos de los piratas se amotinan contra Silver, Livesey y Gunn se le unen en la lucha, matando a varios. Ben Gunn se había hecho con el tesoro y lo había escondido en una cueva. Por eso Livesey había entregado el plano a Silver, porque este ya no tenía valor. Smollett  navega luego a casa con el tesoro, que Gunn había escondido en su cueva, y con Silver como prisionero. Incapaz de mantenerse al margen y dejar que su amigo sea ahorcado, el joven Jim libera a Silver.  A medida que se aleja del barco, Silver le promete a un Jim triste y lloroso por la marcha de su amigo buscar el resto del tesoro algún día, esta vez como el honesto y leal John Silver. emotivo y bonito final.


La película adapta con bastante acierto y fidelidad la novela de Stevenson, siendo esta la mejor versión y la más afamada de todas las realizadas hasta la fecha, a pesar de que la cinta comprima o resuma algunos aspectos de la trama que en el libro están mucho mejor y más minuciosamente desarrollados.  En 1920 Maurice Tourner realizó una versión muda, con Lon Chaney de protagonista, muy olvidada en el mundo de la cinematografía, en 1950 Byron Haskin realizó otra versión para Walt Disney, aunque filmada íntegramente en Inglaterra, con un John Silver magistralmente interpretado por Robert Newton y en 1989 se rodó una versión para la televisión protagonizada por Charlton Heston y dirigida por su hijo, Fraser C. Heston que pasó más bien sin pena ni gloria. Además de estas versiones cabría citar una peli japonesa de dibujos animados del año 1970 dirigida por Hiroshi Ikeda y Koji Mori y una cosmopolita producción (italo-franco-hispano-alemana) de 1972 dirigida por Andrea Bianchi y John Hough, con Orson Welles como John Silver, bastante anodina.

Como he comentado al principio de la entrada, la historia tiene algo de experiencia iniciática, la iniciación de un niño como Jim que pasa de la infancia a la madurez al tener que tomar complicadas decisiones, decisiones propias, decisiones que tienen una clara dimensión moral y en las que afortundamente acertará, como acertará al final cuando deje hablar a su corazón y libere al pirata John Silver, anteponiendo el afecto y la amistad a la ley y al deber, dando a esta oveja descarriada una segunda oportunidad. No todo es blanco o es negro en esta vida, John Silver no es el típico pirata malo y sanguinario que aparenta ser aunque cometa algún crimen que otro, pues a pesar de toda esa fachada dura e incluso despiadada tiene su corazoncito, un corazón noble y protege a Jim como si fuese su hijo, y con su propia vida, llegando a establecerse entre el pirata y el niño una sincera amistad paterno-filial, ejerciendo de esa figura paterna y protectora de la que el chico carecía por la temprana muerte de su padre. La película es pues también, además de una aventura iniciática un canto a esa amistad. La película puede parecer terriblemente ingenua, pero la ingenuidad procede de la visión infantil de su protagonista que vive esta experiencia como la gran aventura de su vida.

Cabe destacar algunas escenas y ambientes de la película y los contrastes de unos momentos y otros: así disfrutamos del ambiente gris y tétrico de la posada Almirante Benwob, con esos siniestros personajes como Pew el ciego o el Perro Negro, la mancha negra (pareciera que la mancha negra tuviese un efecto similar al que paractican el vudu, pues tras recibirla Billy Bones cayó fulminado), el angustioso asalto de los piratas a la posada, escenas humorísticas como la de los piratas que pasan de pelearse como perros a comportarse como personas amistosas cuando entran nuestros protagonistas en la taberna El catalejo, de Bristol, escenas tensas, llenas de inquietud a cada sospechosa muerte que se produce en el bando leal al comenzar la travesía, o en el enfrentamiento en la empalizada, cómicas cuando vemos comer con fruicción al pobre Ben Gunn, o llenas de ternura en la despedida final entre John Silver y Jim Hawkins. Buena ambientación en definitiva, a pesar de la antiguedad de la cinta, dotada con un ritmo agil y divertido que no decae en ningún momento.

Como no disfrutar de esta deliciosa película cuando todos hemos sido niños, todos hemos querido embarcarnos en algún momento en la búsqueda de ese tesoro,  en un viaje lleno de peligros. La búsqueda del tesoro es pues la búsqueda de la aventura, la búsqueda y el reencuentro con la fantasía, con nuestros sueños y nuestras más ocultas aspiraciones infantiles,  la infancia, esa edad  dorada,  ese paraíso perdido que dicen algunos de nuestros primeros e inocentes años. Partimos en el barco de la fantasía y de la aventura, de niños, para desembarcar en la gris vida del adulto años más tarde. Sólo los que no han perdido por completo  la inocencia (hay que mantener vivo ese niño que llevamos dentro), y la capacidad de fantasear,  sorprenderse o  emocionarse, pueden alcanzar,  en esta vida y en  ocasiones, fugaces momentos de felicidad.


Calificación:

viernes, 7 de julio de 2017

"Horizontes perdidos " o la búsqueda del paraíso perdido que todos llevamos dentro



Título original: Lost Horizons. Año: 1937. País: Estados Unidos. Director: Frank Capra. Productor:Frank Capra. Productor ejecutivo: Harry Cohn. Guión: Robert Riskin sobre la novela de James Hilton.Interpretes: Ronald Colman (Robert Conway), Jane Wyatt (Sondra), John Howard (George Conway), Margo (María), Thomas Mitchell (Barnard), Edward Everett Horton (Lovett), H.B. Warner (Chang), Isabel Jewell (Gloria), Sam Jaffe (el gran Lama). Música: compuesta por Dimitri Tiomkin y dirigida por Max Steiner. Fotografía: Joseph Walker. Sonido: Edward Bernds Montaje: Gene Havlick y Gene Milford.Dirección Artística: Stephen Gosson. Efectos especiales: Ganahl Carson  y Roy Davidson Vestuario:Ernest Dryden. Género: Aventuras, fantasía. Duración: 128 minutos. (tras la restauración de 1985, la original era de 132 m.).

Esta es una de las películas de la que más temprano recuerdo tengo. Tendría no más de cinco o seis años cuando la vi en casa de unos vecinos, con los que teníamos una estrecha relación. De esta película recuerdo el asombro que me producía descubrir un  mundo fantástico entre altísimas montañas, un mundo que era lo más parecido al paraíso que había visto nunca y por otro lado recuerdo que también me asombraba el que las personas que vivían en este idílico reino vivían durante cientos de años, casi eternamente. Pasarían otros 40 años hasta que la volviese a ver, encontrando nuevos significados a la cinta y ayer mismo la revisé para realizar esta entrada. Vistas con los ojos de ahora algunos la calificarán de ingenua y otros de lenta en su desarrollo pero sin ser una obra perfecta es para mí, con todo merecimiento, uno de los clásicos entre los clásicos de la historia del cine.L a película está basada en la novela homónima escrita por James Hilton y publicada en 1933.

La película comienza con una revuelta contra los británicos en Baskul (China) en el año 1935. El cónsul  Robert Conway se encarga de organizar la evacuación de sus compatriotas. Los amotinados incendian los hangares, se oyen disparos, los aviones despegan, -magníficas las tomas de la evacuación para la época en la que se rodó-; y finalmente Robert, junto a su hermano George, un paleontólogo, un estafador, una americana enferma de tuberculosis y algún otro personaje consiguen escapar aunque han matado al piloto y su destino varía. Viajan al oeste. Hacen una escala en el desierto, donde repostan, y vuelven a volar. Pero al poco tiempo a la nave le fallan los motores y se estrella entre las montañas cubiertas de nieve. El piloto ha muerto y se encuentran lejos de la civilización. 

El grupo es rescatado por un grupo de nativos, comandados por un tal Chang, con el que atraviesan unos estrechos senderos muy peligrosos, con grandes precipicios hasta el valle de Shangri La, un valle entre las montañas con un clima primaveral, un remanso de paz y bienestar, un pequeño paraíso terrenal. Chang   les traslada a un monasterio lamaísta. Hay una occidental allí, llamada María. Les agasajan pero parece una cárcel dorada. Al parecer les estaban esperando desde hacía dos años. Parece pues que nada es fruto de la casualidad. Robert tiene la sensación de haber estado ya en ese lugar. Su hermano, sin embargo es y se siente diferente. Desconfía del lugar y de Chang, del que dice que habla mucho y dice poco. Cree que hay alguna conexión entre el desvío del avión y ese ignoto y alejado lugar. En el valle de la luna azul viven casi dos mil personas.

Según Chang, Shangri La fue construida por un sacerdote belga llamado Padre Perrault. Eso ocurrió en el año 1713. Llegó casi congelado, se amputó la pierna, y enseñó a los nativos todo lo que sabía. Tenía 108 años cuando terminó de construir Shangri La. Aquí es muy normal vivir hasta una avanzada edad, cuenta  Chang. En Shangri La no hay delitos, no puede haberlos cuando no  no existe ni la necesidad, ni la avaricia, ni la codicia. El hermano de Robert, George traba amistad con la joven occidental, de nombre Maria, que lleva mucho tiempo en el lugar. Robert, por su parte, suspira por una mujer que ha visto fugazmente y que habla su idioma, Se llama Sondra. Con ella disfrutará de momentos inolvidables en bellisimos jardines, junto a frescos riachuelos, sorprendentes cascadas, bosques idílicos. El resto de miembros de la expedición van cambiando su actitud y disposición asi como su situación física y mental:  la americana mejora de su enfermedad. Del estafador sabremos que fue dueño de la compañía eléctrica Bryant y que empezó como lampista y llegó  a erigir un enorme imperio. El hermano de Robert enloquece, dice que están prisioneros. Por alguna razón nos están reteniendo aquí. Incluso llega a hacer uso de un arma aunque su hermano le neutraliza.


A Robert le  recibe el gran lama. Es un hombre muy mayor, pero pronto realiza un descubrimiento mayor, en realidad el gran lama de Sangri La es el padre Perrault. Y es que comprueba, asombrado,  que solo tiene un pie. R.C: Hace 200 años y todavía está vivo. Soy un gran admirador suyo, no delhéroe, sino del hombre, le dice el padre Perrault  a Bob. Y en otro momento de la conversación le recuerda que hay momentos en la vida de un hombre en que vislumbra lo eterno. Le dice que sue su nombre fue sugerido por alguien.Que utilidad puedo tener, pregunta Bob. Necesitamos hombres como usted para que continue la comunidad. Usted es un hombre joven. En su mundo le quedan veinte o treinta  años de actividad. Sin embargo en Sangri La su vida acaba de comenzar  y probablemente sea muy larga. En esta vida hay que tener un propósito. Sin ello, una larga vida es absurda. Y el padre perrault continua: El mundo es una locura, se sume en una orgía de avaricia y brutalidad. Le he traído a Sangri La porque el mundo tiene libros, música y una manera de vivir basada en una simple regla: ten caridad. Que el amor fraternal de Sangri La se extienda por todo el mundo. Renueve la ética cristiana y los humildes heredaran la tierra.

Bob sale de la reunión con Perrault, los otros le preguntan, pero Bob no dice nada. Pasea al día siguiente por las calles de Sangri La, encuentra a Sondra dando clase de música a unos chicos. Ella le cuenta que casi ha nacido allí. Hubo un accidente y su padre y ella se salvaron. Ha crecido junto al padre Perrault. Tiene solo 30 años. Robert asume de buen grado su situación en eese reino idílico: Me han raptado y me han traído aquí pero lo acepto. Quizás haya formado parte deSangri La sin saberlo. En Sangri La podemos encontrar claros ecos o resonancias del mito de "El paraíso perdido" deMiltonOjala todo el mundo podría venir a este valle, suspira Sondra. Entonces dejaría ser maravilloso, le contesta Bob. María se ha enamorado de George, el hermano de Bob. Robert y Sondra, por su parte,  juegan, se besan:  sabíaque vendrías y que nunca te marcharías, ¿me perdonas por haberte traído hasta aquí? le dice ella.

El paleontólogo dice que Sangri La es una utopía y que  quiere estudiar y enseñar geología. El estafador   pretende llevar el agua corriente al pueblo, el oro puede esperar, dice. Parece que casi todos encuentran su sitio, menos George. Bob le interpela:  George pareces un niño, no has dicho nada desde hace 2 semanas. Chang y Robert  juegan al ajedrez. Chang le confiesa que María, la chica que se ha enamorado de George, llegó al valle en 1888, tenía entonces 20 años. ¿Y si se marcha?, pregunta Bob. Tendrá el aspecto que le correspondería a su edad actual, le contesta Chang.


George está cada vez más nervioso, quiere convencer a los otros componentes del grupo: el estafador decide quedarse y la americana  también, asi como el paleontólogo. Tu hermano es un problema. Era de esperar. Tu hermano no me concierne. Es asunto tuyo. Dejo en tus manos el futuro y el destino de Sangri La. Yo voy a morir. Sabía que mi trabajo había terminado cuando te ví. Sé moderado y paciente.  Salvaguarda las riquezas de la mente.  Tu sobrevivirás a la tormenta.  Veo a gran distancia un mundo nuevo que se mueve, son las últimas palabras que le transmite el padre Perrault a Robert antes de morir. Tras su fallecimiento se celebra una gran ceremonia fúnebre.


George quiere convencer a su hermano para que vuelva a la civilización. Sin embargo Robert intenta convencerle para que se quede. Le cuenta a su hermano todo lo que sabe. George no se cree nada. Se enfurece, dice que son todo mentiras:  este no es un lugar para tí, ha sido ella, (por Sondra) la que te ha cambiado.  Esto es más fuerte que el amor fraternal, confiesa Bob. María se dispone a marchar con George. Bob le advierte  a George sobre lo que le pasará a María, la chica rusa,  si sale de Sangri La. María le informa a Bob  que  ella pagó a los porteadores, y le dice que todo es mentira, que el abad se creía el padre Perrault, que es mentira lo de que se va a convertir en una vieja. Que prefiere morir congelada en una tormenta que vivir un minuto más allí. Robert decide ir con ellos. Chang le dice a Sondra que Bob se irá pero que regresará.

Los tres enfilan el desfiladero, la puerta de entrada, en este caso de salida de ese reino mágico. Robert mira hacia atrás. Sondra les sigue de hurtadillas hasta el desfiladero. Continúan, en un momento dado alguien les dispara. Se produce una avalancha. Mueren los porteadores.  Arrecia el frio, la ventisca. Maria no puede seguir, se queda semincorporada en mitad del camino. Cuando miran su rostro, su cara es la de una vieja.  George enloquece y cae por un precipicio. Robert da tumbos y como puede se arrastra y sale de aquellas montañas hasta que es encontrado por la civilización. 

Robert Conway vive, es la noticia que aparece en todos los periódicos. Pero Conway ha sufrido una amnesia total de un año entero. Lo siguiente que sabemos de él es que Conway recuperó la memoria y  escapó. Hablaba de Sangri La. Lord Lamsford abandona la busqueda de Conway, es el último titular de los rotativos. Lamsford le siguió durante diez meses. Dice que Robert aprendió a pilotar aviones. Llego a un lugar lejano del Tibet. El hombre que no era humano. Seis veces intentó atravesar aquellas montañas, aquel desfiladero y seis veces fracasó y por fin desapareció por aquel maldito puerto de  montaña. Lo crees, le preguntan a Lord Lamsford. Si , lo creo porque necesito creerlo. Un brindis por mi esperanza de que Conway encuentre su Sangri La, por la esperanza de que todos encontremos nuestro Sangri La. Asi acaba esta inolvidable película, con las palabras posteras de Lord Lamsford.

Sangri La representa, como he comentado anteriormente, el paraiso perdido, la felicidad utópica que todos, de una u otra forma buscamos, un lugar donde  no hay codicia o avaricia, ni envidia porque todo lo que se necesita para ser feliz se tiene al alcance de la mano, un lugar de eterna juventud, un entorno idilico muy apropiado para el goce y la contemplación, y porque no, para  desarrollar nuestras capacidades y habilidades, sin ningún afan por la comptencia o el medro, base de nuestro actual sistema de valores.  La película que recibió dos oscars por categorías menores entronca con el cine vital y optimista de Capra, ese cine cargado de valores, donde sus protagonistas son personajes extraordinariamente idealistas, como en el fondo también lo es Robert Conway, y que  algunos  tachan injustamente de ingenuo, simple y sentimental y que vemos en otras películas suyas como "Caballero sin Espada", "Juan Nadie"  o "Que bello es vivir".


Calificación: