Una serie con una temática y una ambientación inquietante que no sabe aprovechar todo su potencial. Nos encontramos ante una trama conspirativa a cargo de un extraño grupo, los "Qui reverti", personas que han sabido controlar su proceso de reencarnación de forma voluntaria y ocupan otros cuerpos, desplazando previamente a sus primitivos moradores. Además recuerdan perfectamente cada una de sus vidas a lo largo de los siglos. El elemento motor de la trama parte de una crisis matrimonial. Jack Whelan es un expolicía al que la vida le da un vuelco de un día para otro. Observa que su mujer, Amy, comienza a tener una manera de comportarse bastante extraña. Es ella pero no se comporta como tal. La sigue. Observa su comportamiento. Se junta con personas desconocidas. Se distancia emocionalmente de él. Comienza a tirar del hilo de una increíble historia que al principio no acaba de creer pero en la que caerá irremisiblemente enredado.
En otro lugar, un asesino ha matado a buena parte de los miembros de la familia Anderson. Una inquietante niña, Madison, desaparece de su casa. Y pronto asistiremos a su sangriento peregrinaje. En realidad su cuerpo está ocupado por un "qui reverti", Marcus Fox, un peligroso asesino en serie que fue emparedado por sus compañeros, condenado a no reencarnarse jamás, pues su sangrienta carrera les ponía en peligro a todos. Junto al policía, nos encontramos con otro personaje clave, Richard Sepherd, guía de los Qui reverti, culpable del regreso de Marcus e implacable y frío asesino que ejecuta las ordenes de esta extraña secta. Todas estas líneas argumentales, aparentemente inconexas, convergen en una trama que nos mantiene en vilo hasta el final. Ayer ví de golpe la mitad de los 8 capítulos que componen la serie. La serie produce una desasosegante inquietud, sobre todo cuando vemos a la niña comportarse como un adulto, o cuando vemos la frialdad del asesino Shepherd, o la extraña frialdad de la desconocida esposa, etc.
En otro lugar, un asesino ha matado a buena parte de los miembros de la familia Anderson. Una inquietante niña, Madison, desaparece de su casa. Y pronto asistiremos a su sangriento peregrinaje. En realidad su cuerpo está ocupado por un "qui reverti", Marcus Fox, un peligroso asesino en serie que fue emparedado por sus compañeros, condenado a no reencarnarse jamás, pues su sangrienta carrera les ponía en peligro a todos. Junto al policía, nos encontramos con otro personaje clave, Richard Sepherd, guía de los Qui reverti, culpable del regreso de Marcus e implacable y frío asesino que ejecuta las ordenes de esta extraña secta. Todas estas líneas argumentales, aparentemente inconexas, convergen en una trama que nos mantiene en vilo hasta el final. Ayer ví de golpe la mitad de los 8 capítulos que componen la serie. La serie produce una desasosegante inquietud, sobre todo cuando vemos a la niña comportarse como un adulto, o cuando vemos la frialdad del asesino Shepherd, o la extraña frialdad de la desconocida esposa, etc.
La serie esta plagada de aciertos: desde la perturbadora cabecera, con su onírico diseño, pasando por buena parte de los personajes, especialmente el de Sepherd, Amy (envejecida Mira Sorvino), Madison, etc, los libros (con esa frase de que "en principio hubo muerte"), la reiterada presencia del número 9, un extraño edificio que resulta ser el cuartel general de los "qui reverti", los objetos detonantes para la vuelta, una vibración de baja frecuencia que no se oye pero se percibe y que te sintoniza con la presencia de los que regresan, una emisora de radio que denuncia la oscura conspiración. Pero falla algo en el conjunto. Quien haya leída alguna de mis críticas sabe que no me influyen para nada críticas externas anteriores. Esta serie ha tenido muy malas críticas. Yo no creo que sea tan mala como algunos dicen. Está bien, sin más, simplemente. Pero podría haber sido mucho mejor. En mi opinión son algunos fallos y desequilibrios en el guión y en la dirección y montaje final los que malogran el conjunto.
La trama del expolicia se convierte en el elemento central de la serie cuando debería haber tenido una menor presencia o al menos una presencia más equilibrada. Hubiéramos deseado saber más de la máquina de los espíritus creada por Anderson, de la historia de Gary (con su hija ocupada por el espíritu de Donna) conocer con más detalle o precisión las historias anteriores de Amy o de Marcus, etc. A pesar de los aciertos parciales: atmósfera, personajes, etc se fracasa en el modo de coser o de hilvanar esta historia, haciéndola por ello menos creíble y poderosa, sin que logre eso, tan difícil a veces de conseguir en una serie o película, como es la capacidad de trascender, de quedarse en la retina y aun en la mente del espectador durante largo tiempo, y mucho menos de tener alma, ese alma que consigue que las películas o series se conviertan en objetos de culto. La serie está basada en la novela del mismo nombre del año 2007 cuyo autor es Michael Marshall Smith. La productora es la misma que la de "Orphan Black", la BBC America, siendo productor ejecutivo Glen Morgan, productor y guionista de series como "Expediente X" y "The River".
Act: A finales de febrero de 2015 se da a conocer oficialmente su cancelación
La trama del expolicia se convierte en el elemento central de la serie cuando debería haber tenido una menor presencia o al menos una presencia más equilibrada. Hubiéramos deseado saber más de la máquina de los espíritus creada por Anderson, de la historia de Gary (con su hija ocupada por el espíritu de Donna) conocer con más detalle o precisión las historias anteriores de Amy o de Marcus, etc. A pesar de los aciertos parciales: atmósfera, personajes, etc se fracasa en el modo de coser o de hilvanar esta historia, haciéndola por ello menos creíble y poderosa, sin que logre eso, tan difícil a veces de conseguir en una serie o película, como es la capacidad de trascender, de quedarse en la retina y aun en la mente del espectador durante largo tiempo, y mucho menos de tener alma, ese alma que consigue que las películas o series se conviertan en objetos de culto. La serie está basada en la novela del mismo nombre del año 2007 cuyo autor es Michael Marshall Smith. La productora es la misma que la de "Orphan Black", la BBC America, siendo productor ejecutivo Glen Morgan, productor y guionista de series como "Expediente X" y "The River".
Act: A finales de febrero de 2015 se da a conocer oficialmente su cancelación