Termina la cuarta temporada de "Orphan Black" que finalizará el año que viene con una quinta y última temporada

Hace varias semanas que terminé de ver la cuarta temporada de "Orphan Black", una de las series revelación, hace unos años, con ese increíble "tour de force" que supone la múltiple y compleja  interpretación de Tatiana Maslany en sus variados y casi siempre bien matizados personajes: Sarah, Cosima, Rachel, Alison, Elena, Kristal, MK, por citar algunos de los muchos que ha interpretado. La actriz está nominada este año  en los Emmys en la  categoría de actriz de drama. Tras una tercera temporada un tanto floja y repetitiva centrada en los clones del proyecto Castor, la cuarta temporada ha vuelto a elevar el listón de la serie regresando al nivel alcanzado en sus inicios, de hecho, incluso argumentalmente, volvemos al inicio y asistimos, al principio de esta temporada,  al desarrollo de los últimos días de Beth, la clon policía que se tiró al metro ante Sarah Manning en el primer episodio de la serie. Aparece un nuevo clon, MK, una autentica hacker que aparece disfrazada con una careta de oveja, tal y como vemos en una de las fotografías adjuntas y episódicamente un segundo clon que ya vimos en la temporada anterior, Kristal Goderich, una atractiva esteticien, y que también aparece en una foto al final de la entrada. 

Esta temporada está centrada fundamentalmente en la lucha de nuestros queridos  clones contra la corporación Brightborn, dirigida por la implacable Evie Cho, una neolucionista sin escrupulos que realiza horribles experimentos con humanos y que pone todo su empeño en el avance de la ingeniería génetica, de la que, por cierto, unos repugnantes gusanos que se implantan en la cara son uno de sus mejores exponentes. Sarah contará con el apoyo, al menos aparente, de su proverbial enemiga Rachel Duncan y de su madre adoptiva, Susan Duncan, máxima responsable de los programas LEDA (el programa de los clones femeninos) y CASTOR (el programa de los clones masculinos). También asistiremos al brutal asesinato de la madre de Siobhan Sadler, la madre adoptiva de Sarah, cuyo material genético se utilizó para hacer todos los clones femeninos, a cargo del detective Marty Ducko, responsable también del suicidio de Beth. La imprevisible Rachel Duncan dará al final de la temporada un giro dramático a la trama.  La comprometida situación en que quedan Sarah y Cosima al final de esta temporada así como otros muchos cabos sin atar que quedan, como la aparición  del creador del Neolucionismo, nos anima a seguir con interés el final de esta interesante serie.