Mostrando entradas con la etiqueta Juego de Tronos. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Juego de Tronos. Mostrar todas las entradas

martes, 29 de agosto de 2017

La séptima temporada de "Juego de Tronos", la más vistosa y entretenida de todas


Ayer por la noche finalizó la séptima temporada de "Juego de Tronos". Ha sido la temporada más corta de todas, con tan solo siete episodios frente a la decena tradicional. Algunos la han calificado de previsible pero es que a estas alturas de la película, como quien dice, cuando toda la historia se encamina hacia el final, es difícil no caer en lo previsible y yo diría que en lo esperado y deseable, salvo que se quiera dar un brusco volantazo, un giro de guión imprevisible y al final no contentar ni a tirios ni a troyanos. Si que es verdad que el ritmo es trepidante, que los viajes que antes costaban largas semanas, capítulos y temporadas hoy se despachan en un "plisplas", como el viaje del Dragón y Daenerys más allá del muro, en el penúltimo episodio de esta temporada, pero bueno, en el mundo fantástico de Poniente, se puede permitir, a veces, alguna licencia que para nada empaña el resultado, al contrario. 

Siempre habrá puristas que pongan en duda la coherencia y consistencia de la serie, pero el hecho es que la  temporada ha sido más rápida, entretenida y espectacular que nunca. Si que es verdad que puede que alguna salvación "in extremis" fuese poco creíble, como la de Jon Nieve en su lucha contra los espectros o que alguna escena clave requiriese de algo más de desarrollo, como el encuentro amoroso entre Jon y Daenerys del último capítulo pero es lo que hay. El tono reflexivo y discursivo típico de las primeras temporadas, en la que se notaba la base literaria de Martin, se ha visto superado por la acción más palomitera, en le buen sentido de la palabra, en la que los guionistas han tenido que volar por libre, imagino que con el esporádico asesoramiento del autor.



En esta temporada, inolvidable, recordaremos la venganza de Arya contra los Frey o  la llegada de Daenerys a Rocadragon, (inolvidable San Juan de Gaztelugatxe) en ese primer capítulo introductorio,  o la derrota de las aliadas de la rubia platino en el siguiente, las Arena de Dorne o Olenna de Altojardín, el hogar de los Tyrell. Asistiremos, en el tercer episodio, al encuentro no exento de tensión de Dany y Jon, aunque esa tensión se trocará pronto en la típica tensión sexual no resuelta, la venganza de Cersei Lannister contra Ellaria Arena, el regreso de Bran Stark, que se ha convertido en el  nuevo "Cuervo de los Tres Ojos" a Invernalia así como de su hermana Arya. El cuarto episodio nos traerá una de las batallas más espectaculares, la derrota, sin paliativos, del ejército Lannister a manos de las fuerzas combinadas de dragones y dothrakis, unas escenas que difícilmente olvidaremos. 


En el quinto, Daenerys impartirá ejemplo o justicia, incinerando literalmente a los Tarly, a pesar de los consejos en contra de Tyrion Lannister, la mano de la Reina Plateada. Mientras, Meñique, en Invernalia seguirá sembrando la inquina y la desconfianza por doquier, esta vez entre las hermanas Stark, con una inoportuna nota desenterrada de años atrás. En el sexto asistiremos al viaje casi suicida de una extraña compañía de hombres en otros tiempos enfrentados (Tormund, el Perro y otros integrantes de la Hermandad sin Estandartes como Beric y Thoros, asi como Jon, Jorah Mormont, Gendry) una misión suicida como es la de internarse en los dominios de los Caminantes Blancos y capturar un Muerto Viviente para demostrar al mundo que la amenaza es real y que su derrota debe ser prioritaria. Solo la intervención providencial de Daenerys con sus dragones evitará la muerte de nuestros héroes, aunque sea a costa de que uno de los dragones, Viserion,  se convierta  en otra cosa, una insuperable Némesis,  por el Señor de la Noche.

El último capítulo de más de 80 minutos reunirá a los antiguos enemigos, -la tensión se cortaba con un cuchillo-,  en Pozodragón, a la afueras de Desembarco del Rey, donde Cersei comprobará la espeluznante cara de la amenaza, al enseñar El Perro  al muerto viviente que la heróica compañía trajo de más allá del Muro. Habrá una aparente alianza para luchar contra este terrible enemigo pero ya sabemos como se las gasta Cersei, pues para ella todo ha sido una estratagema para  acabar con sus enemigos. Su hermano y amante, Jaime Lannister, decidirá finalmente abandonarla y todo parece indicar que encaminará sus pasos al Norte. En Invernalia, Lord Baelish, Meñique, recibirá su merecido tras descubrirse públicamente todos sus crímenes y complots. La ejecutora será, como no, la eficiente y letal Arya. 

Casi en paralelo se nos muestran dos escenas, por un lado, Bran confiesa a Sam, -que acaba de regresar de la Ciudadela-, que Jon es hijo legítimo de Lyana Stark y Raegar Targaryen y que su nombre es Aegon Targaryen y por lo tanto el legítimo heredero del Trono de Hierro y por otro lado asistimos a la esperada escena de cama de Jon y Daenerys, muy poco aprovechada, desde el punto de vista de la trama. Lo que son las cosas, resulta que este par son tía y sobrino, pero bueno dada la poca importancia que le dan en estos mundos de Dios...al tema carnal-familiar, sobre todo cuando hemos visto la clara relación incestuosa de Cersei y Jaime Lannister parece que ese pequeño detalle no importará demasiado. 


El final es apoteósico, con Viserion, el dragón ahora pilotado por el Rey de la Noche, derribando el Muro, la gran barrera que separaba al mundo de los vivos y de los muertos. El fin se acerca, pero eso bueno, lo veremos en la octava y última temporada. Seis episodios nos separan del final. La espera se hará larga, probablemente el final se demore hasta  finales de 2018 o principios de 2019. ¿El final?. Todos esperamos la derrota del ejercito de los muertos, la derrota de Cersei y solo nos quedan grandes y pequeños cierres de nuestros familiares personajes, ¿quien gobernará?, ¿Jon/Aegon y/o Daenerys o ambos dos?, ¿qué pasará con las hermanas Stark, Bron, Jaime, Tyrion, Brienne, El Perro, Tormund, (si no han muerto),  los hermanos Greyjoy de las Islas del hierro y su odioso tio, Euron, Jorah, Valys, Melisandre, Gendry, Gusano Gris y Missandei y tantos otros que después de casi 8 años se nos han hecho tan familiares?. La solución dentro de 13 o 18 meses.


domingo, 3 de julio de 2016

La crucial sexta temporada de Juego de Tronos


Probablemente alguno pueda pensar, dada la carencia de entradas en este blog sobre esta serie, que no soy seguidor de Juego de Tronos. Pues no. Lo soy. Sigo la serie desde el primer capítulo de la primera temporada, allá por el año 2011. Pero es tal el número de webs y blogs que tratan con absoluta minuciosidad esta serie que nunca he considerado necesario realizar un aporte sobre este verdadero fenómeno televisivo mundial. Soy un seguidor pero nunca me he considerado un fanático. Creo, contrariamente a algunas opiniones, que la serie ha ganado en vistosidad y espectacularidad conforme ha ido avanzando en sus tramas. Y he de reconocer que esta  temporada, que se ha desmarcado de los libros de Martin, ha sido   probablemente la que más me ha gustado, de lejos. Ha sido la más dinámica y entretenida de todas. Había cierta morosidad y lentitud en alguna de las temporadas anteriores. Sí, en cinco temporadas han pasado bastantes  cosas, muchos personajes han desaparecido, pero esta temporada ha sido un autentico torbellino. Parece  que todas las piezas del complicado juego de ajedrez, de movimientos políticos, estratégicos y militares que es Juego de Tronos se encaminan a su desenlace final. 

Por recuperar algunos de los instantes más importantes de esta memorable temporada, que son muchos, en esta hemos asistido a la resurrección de Jon Nieve, -al comienzo de la temporada-, y su coronación en el último capítulo como el rey en el norte, tras el contundente discurso de la niña Lyanna Mormont;  hemos disfrutado de la fuga de Sansa Stark;  hemos asistido a la captura por los dohrakis y al regreso victorioso de Daenarys Targaryen a Meereen, en la bahía de los Esclavos; hemos descubierto el secreto de los caminantes blancos (los crearon los Hijos del Bosque para defenderse de los hombres que estaban derribando sus árboles sagrados),  así como los poderes de Bran Stark (que ha tomado el relevo al Cuervo de los Tres Ojos y que es capaz de viajar astralmente en el tiempo).

Hemos asistido, también,  a la venganza de Cersei Lanister sobre el septo y su Gorrión Surpremo y a su posterior autocoronación, al suicidio de Tommen, al comienzo de la venganza de Aria Stark con la muerte de Walter Frey, -el odioso traidor de la Boda Roja donde murieron asesinados Rob Stark, su esposa y su madre Catelyn-, después de haberle hecho comer a sus hijos en un pastel, (por fin le sirvió de algo aquella habilidad de cambiar caras que le enseñaron en la  Casa del  Dios sin Rostro (quienes serán los siguientes objetivos en su lista); hemos sufrido al contemplar el incierto resultado de la batalla de los bastardos entre Ramsay Bolton y Jon Nieve, una batalla que difícilmente olvidaremos, con la ansiada muerte, al final,  de uno de los peores villanos de la serie. Tras muchas muertes inútiles e incluso inesperadas, algunas de las que se han producido en esta temporada a buen seguro habrán llenado de satisfacción a muchos fans. 

Triste el final de Cersei que tiene de nuevo el poder en sus manos pero que se ha quedado sin lo que más deseaba: sus hijos. Ahora solo la mueve la ambición y el odio. Su futuro parece bastante desolador. Inolvidable la imagen del final del último capítulo  con la gran Khaleesi surcando los mares con cientos de barcos,   miles de soldados y sus tres dragones  sobrevolando el cielo, aproximándose a Poniente. ¿Qué nos espera en la próxima temporada?. Mucho. El invierno ha llegado y con él los muertos. Se acerca el  desenlace final. Con el descubrimiento de que Jon Nieve no es el bastardo de Ned Stark, sino que es en realidad hijo de Lyanna Stark, hermana de Ned y de Rhaegar Targaryen, a quien Ned  le hizo pasar por su propio hijo para salvarle la vida, nos encontraremos con un nueva situación, por un lado el nuevo rey en el norte, Jon Nieve, el verdadero protagonista de la serie y el aspirante con más legitimidad al trono de hierro por encima incluso de la khaleesi, en el que se auna la sangre norteña, el hielo, y la sureña, el fuego de los dragones, de los Targaryen;  por otro lado la joven Targaryen aspirante a sentarse en el trono de hierro. 

¿Asistiremos a un nuevo pulso o a un pacto esta vez familiar, o incluso matrimonial, entre el norte y el sur que se sumará al que ya ha cerrado la khaleesi con los Greyjoy, los Martell y los Tyrell (son las mujeres al final las que van a cambiar las relaciones de poder en los siete reinos y en el trono de hierro),  para acabar con el declinante poder de los Lannister y aun peor, para finiquitado éste, acabar con la peor de las amenazas para los siete reinos, la letal amenaza de los caminantes blancos?. Tal vez. Pero seguramente no será tarea fácil. La próxima temporada parece que tendrá siete episodios frente a los diez tradicionales y la octava y probablemente última seis. Se nos hará larga la espera.