Título: La lógica del sueño. Después del apasionante capítulo anterior hoy nos toca un episodio más tranquilo con el típico caso autoconclusivo. Comenzamos el capítulo en la bolera de Sam Weiss a donde acude Olivia a darle las gracias. ¿Quien ha muerto?. Recuperar la memoria no era el único problema. Lo reconozca o no su vida es una pesadilla. . Con estas frases le recibe el amigo Sam a nuestra Olivia.
El caso se inicia en un edificio de oficinas de Seattle, en un despacho profesional un hombre que responde al nombre de Greg Leiter ve monstruos donde debiera ver compañeros de trabajo y el jefe de todos los monstruos es su propio jefe, al que mata golpeándolo con su maletín hasta la muerte. Peter y Olivia se desplazan hasta el hospital donde se encuentra el agresor. Le interrogan y después que les confiesa que vio la oficina invadida por unas monstruosas criaturas, le da un ataque con convulsiones, se le pone el pelo blanco y muere, como si hubiera envejecido, de pronto.. El hombre había muerto después de descansar 16 horas, de deshidratación y cansancio. Walter quiere irse a casa, no soporta los hospitales, y este le recuerda demasiado al St. Claire. Se vuelve a casa, a su nueva casa en Boston bajo la atente mirada del agente Kashner.
Olivia y Peter interrogan a la viuda de Greg. Padecía de sonambulismo que acabó con un tratamiento, después de 6 meses. En el laboratorio, Walter descubre una incisión quirúrgica en el muerto. Posteriormente se produce un segundo incidente, esta vez una mujer que atropella a un ciclista, matándolo. A la mujer también se le pone el pelo blanco y por lo que sabemos más tarde también vió algún tipo de monstruo antes de fallecer.
Posteriormente Peter visita a Olivia en su apartamento. Los dos llevan camisetas parecidas y hablan de sueños y pesadillas. Peter tuvo pesadillas de pequeño todas las noches, imaginamos que como consecuencia de su robo desde el otro universo.
Posteriormente Peter visita a Olivia en su apartamento. Los dos llevan camisetas parecidas y hablan de sueños y pesadillas. Peter tuvo pesadillas de pequeño todas las noches, imaginamos que como consecuencia de su robo desde el otro universo.
Walter descubre que hay un microchip dentro del cerebro de los muertos, conectado al hipotálamo. El sueño se regula en esa zona del cerebro. Con la ayuda de Nina Sharp descubren que el chip es en realidad un biochip que conecta el cerebro a un ordenador remoto, de forma que actúa en una doble dirección, transmite información del sueño y también provoca el sueño en sí. Peter y Olivia contactan con un entendido en el asunto, el doctor Nasdayak que reconoce que conoce a las victimas que al parecer formaban parte de un ensayo clínico junto a otras 82 personas, por lo tanto puede haber 82 victimas potenciales.
Cuando van a su despacho lo encuentran todo revuelto y alguien se ha llevado el servidor central con los datos de los pacientes. Alguien accede al biochip de oitra paciente, alguien que está conectado. Al poco tiempo vemos a una chica en la cocina de un restaurante que de pronto ve como están cocinando unas manos apuntadas. La chica coge un cuchillo y asesina a su compañero, creyendo que es un monstruoso antropofago e igualmente acaba como las dos victimas anteriores, con el pelo completamente blanco.
El doctor Nasdayak señala a su ayudante como un posible sospechoso, de hecho no ha ido a trabajar sin embargo pronto descubriremos que el motivo de su absentismo se debe a que estaba muerto. Lo encuentran muerto dentro de un armario de su casa. Por su parte, Walter ha utilizado al agente Kashner como cobaya en experimentos de control mental y descubre que el biochip no daba ordenes sino que transmite los sueños directamente a la mente del receptor, provocando en este sensaciones solo comparables al LSD u otras drogas psicodélicas y en el emisor alucinaciones paranoicas, incapacidad para distinguir entre sueño y realidad. El biochip accedía a la información sensorial que pasaba por el tálamo. Los biochips robaban los sueños y provocaban la muerte, por agotamiento, del robado.
Olivia descubre que el culpable es el doctor Nasdayak, que padece trastornos de doble personalidad como si de una especie de Mr Jekill y Mr Hyde se tratase . Pero aun tendremos casi una nueva victima, un piloto de avión que es sorprendido en pleno vuelo de su hidroavión por las alucinaciones: ve a sus compañeros sin rostro. Peter y Olivia llegan a tiempo e interrumpen la conexión mental del médico, destruyendo el servidor y falleciendo.
Dejando a un lado el caso de la semana, podemos comentar otras cosas: como que Olivia sigue obsesionada por la muerte de su compañero Charlie Francis. Recuerda que le dijo en su misión: Todo saldrá bien. Por cierto pocos recuerdan que Olivia llegó a ser, estando en la Marina, fiscal militar. Sam Weiss le pide a Olivia que recoja una tarjeta de visita de cada persona que lleve algo rojo y haga un anagrama con la primera y última letra de los nombres de las tarjetas, hasta que encuentre una frase. Cuando Olivia va a llevar flores a la tumba de Charlie encuentra la solución: Todo saldrá bien, en inglés: you're gonna be fine. Por otro lado, Peter sueña (papa, que pasa), tiene una pesadilla, sueña que alguien le robó de niño. Se lo cuenta a un Walter que temeroso le pregunta...¿y del resto no te acuerdas?.
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